No solo los SUV están creciendo como la espuma al rededor del mundo, también las pick-up están tomando relevancia a gran paso, tanto de trabajo, pero especialmente las de enfoque recreativo y con capacidades off-road. Ya ninguna marca de las tres grandes estadounidenses deja un hueco libre en el segmento y aprovechando la llegada del facelift a México, nos pusimos al mando de la Chevrolet Cheyenne ZR2 2022.
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De inmediato sabes que no es la Cheyenne de toda la vida
En general la gama de Chevrolet Cheyenne y Silverado se actualizaron con cambios visuales menores, parrillas de nuevas formas, faros algo más estilizados e interiores con diseño nuevo, además de más equipo. En el caso partícular de la variante ZR2, podríamos decir que es una progresión de lo que en su momento fue la Cheyenne Trail Boss, aunque con un par de ajustes para una experiencia más divertida. Antes de hablar de sensaciones de manejo, mejor veamos otras de sus características.
Por fuera esta Cheyenne se caracteriza por una parrilla en color negro, un emblema de la marca cóncavo y con los contornos interiores en color rojo, los emblemas ZR2, un cofre más abultado y con un contraste negro al centro.
También encontrarás elementos muy marcados de corte off-road, para empezar una defensa frontal rediseñada que permite un mejor ángulo de ataque, de hasta 31.8º, esta misma cuenta con dos puntos de fácil anclaje y remoción para poder quitarla o colocarla rápidamente, ya sea para librar un obstáculo o reemplazarla en caso de daño. Además, podrás ver dos ganchos de arrastre expuestos y una placa protectora en la zona baja para evitar daños en las zonas más accidentadas.
Sus llantas son de totalmente pensadas para el desempeño fuera de pavimento y se acompaña de rines de 18" de diseño exclusivo para este modelo. Ya en la parte trasera tenemos una batea similar a la del resto de la gama Cheyenne con varios puntos de amarre, bedliner y hasta apertura de tapa de batea eléctrica.
Un interior que demuestra más lujo y madurez como producto
Por dentro Cheyenne da un salto en diseño y percepción de calidad. Por un lado tenemos formas más minimalistas y horizontales que van a más con la tendencia actual de diseño y que también favorecen una sensación de mayor espacio interior —como si no sobrara en un mastodonte de estas medidas—. También hay materiales algo mejor terminados para mejorar su percepción de calidad.
En el apartado de equipo hay un par de cosas nuevas a destacar. De inicio tenemos una nueva pantalla para el sistema de info-entretenimiento con tamaño de 13.4" de posición horizontal y con una nueva interfaz más sencilla de comprender.
A esta nueva pantalla se suma la incorporación de Google Built In, que permite ejecutar de forma nativa aplicaciones como Google Maps, Google Play para escuchar música o el mismo Google Assistant para pedir información o incluso controlar algunos elementos de la camioneta como el aire acondicionado a través de comandos de voz.
Más allá, seguimos teniendo Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, Amazon Alexa también para pedir información o controlar elementos inteligentes de nuestro hogar o negocio a través de comandos de voz y punto de acceso Wi-Fi. Finalmente, se complemente con un sistema de audio Bose con gran sonido.
El cuadro de instrumentos es totalmente digital, también con una interfaz algo más clara. Más allá tendremos elementos que ya conocíamos en los modelos Cheyenne de más alta gama, es decir: A/C automático, quemacocos, asientos delanteros eléctricos, ventilados, calefactados y con memoria; con ventilación y calefacción también para los asientos traseros, cargador inalámbrico para celular, entre otros.
Exclusivo de esta versión es un interior en color negro con acentos en color gris para asientos y ciertas zonas del tablero.
En seguridad Chevrolet no se limita y nos ofrece la Cheyenne ZR2 con equipo como: 6 bolsas de aire, control de estabilidad, control de tracción, asistente de ascenso en pendiente y descenso con conducción a un solo pedal, OnStar con servicios de localización y envío de servicios de emergencia, visión de 360º, alerta de punto ciego, mantenimiento de carril, control de velocidad crucero adaptativo, freno autónomo de emergencia con reconocimiento de peatones, reconocimiento de señales de tránsito, asistente de maniobra de remolque y monitoreo de presión de llantas.
Capacidad off-road para estar al nivel de muchos de los aventureros de toda la vida
La Cheyenne ZR2 se desarrollo pensando en el mundo de las competencias off-road al estilo Baja, la marca incluso llegó a inscribir una ZR2 de preproducción con ligeras modificaciones a una competencia para demostrar y comprobar sus capacidades.
Es por ello que lleva una serie especial de modificaciones a la suspensión, comenzado con amortiguadores Multimatic de alto desempeño, resortes y muelles especiales para soportar más maltrato, permitir mayor altura libre al suelo, mejor articulación y estabilidad en terrenos disparejos.
A eso se suma una nueva puesta a punto en diferenciales y relación de la transmisión y entrega de poder para adaptarse mejor a los distintos modos de manejo enfocados a la conducción off-road ya sea en superficies con muy poco agarre, para escalar sobre rocas o para avanzar a velocidades altas en dunas y terracería.
Cuenta con modos 2H, 4L, 4H y bloqueo de diferenciales delantero y trasero.
Para mover todo esto, se queda con un motor V8 atmosférico de 6.2 litros con 425 hp y 460 lb-pie de par, que llevan todo el poder a las cuatro ruedas a través de una caja automática de 10 cambios.
En la ruta off-road nos demostró capacidad para escalar rocas y hacer descensos en pendientes sumamente inclinadas, articulaciones de grandes proporciones y hasta presumió de sus capacidades de descenso con un solo pedal. En pocas palabras, capaz para muchas situaciones, teniendo como limitante más constante el tamaño mismo de una pick-up full size, más allá de su preparación para todo terreno.
En carretera, la comodidad domina sin problemas, aunque constantemente sentirás vibraciones en volante y pedales además de algo de ruido del rodar de las llantas colándose a la cabina, aunque esto es completamente normal por el tipo de llantas especiales para off-road.
Una nueva rival para la Ford Raptor, aunque con un enfoque más serio
Cheyenne ZR2 pone la mira en el mercado de la famosísima Ford F-150 Raptor, ese nicho de la diversión con un vehículo que nació pensado para el trabajo. ¿Cumple su misión? Sí, aunque de una forma algo más seria, pues no olvida del todo su capacidad para trabajo, pues sigue logrando cargar 653 kg en la batea y arrastrar hasta 4,037 kg.
Tal vez no sea tan explosivo y rebelde como una Raptor, pero no deja duda que puede ir rápido con el pie a fondo en terrenos accidentados, que se puede enfrentar a escaladas y descensos a los que una pick-up común, jamás lograría pasar.
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La noticia Chevrolet Cheyenne ZR2, la manejamos: una pick-up para llevar la recreación a donde sea fue publicada originalmente en Motorpasión México por Mau Juárez .
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